30 septiembre 2015

Review Apple White ❤ Ever After High

El otro día tuve la suerte de dar con un chollazo bastante importante, y es que en las tiendas Hipercor de Zaragoza han dejado a mitad de precio algunas de las muñecas pertenecientes a la serie de Ever After High, por lo que fue mi oportunidad de hacerme con uno de los personajes que me rondaba la cabeza, nada menos que la más hermosa del reino: Apple White.

En este caso, a la hora de reseñarla, he optado por un formato más cómodo y ameno, como es el caso de un pequeño vídeo (por el que he descubierto que la edición -a pequeña escala, no nos vengamos arriba- resulta de lo más entretenida, será cosa de que yo también soy excesivamente cuadriculada ><). Quiero aprovechar la plataforma YouTube a modo de herramienta secundaria para este tipo de entradas así como para elementos relacionados con libros y lecturas del mes, como mostraré más adelante.

Así que sin más dilación, os dejo con mi reseña y opinión:


Bonus~
Vistas de la caja con luz natural.


26 septiembre 2015

Reseña: Ore Monogatari!!

Ayer terminé con el último capítulo de Ore Monogatari!!, el anime que ha conseguido volver a engancharme a una serie y que la disfrute tanto como antes.
La historia versa acerca de un protagonista muy poco común: alto hasta alcanzar cotas enormes, muy fuerte, un poco bruto y lo que podríamos considerar como feo (si lo comparamos con su amigo del alma, Suna, el típico chico misterioso y atractivo de este tipo de series). Un día, durante un viaje de metro camino a la escuela, Takeo ayuda a una dulce chica que estaba siendo acosada, sufriendo lo que podríamos considerar como un flechazo a primera vista. A partir de este momento, la serie se va a centrar en la relación entre Takeo y Rinko Yamato -la chica mencionada-, así como en la amistad, la superación, las nuevas relaciones o los rivales.

Antes de meterme en los diferentes apartados que me gusta contemplar en estas reseñas, quiero dar una opinión general acerca de Ore Monogatari!!
Se podría decir que este es un anime muy simple donde no ocurren grandes acontecimientos, pero que conquista al espectador por su dulzura y simplicidad. Igualmente, el hecho de que no nos encontremos con la típica historia de amor suma puntos a su favor, dotando de cierto aire de comedieta a la trama, que también pasará por otros momentos dramáticos y difíciles. Las comparaciones son odiosas, pero personalmente pienso que ya iba siendo hora de un anime así, dejando de lado la alabada Ao Haru Ride con sus interminables problemas (sé que esta serie ha sido bastante alabada, pero cuando la vi, después de innumerables buenas críticas, no me pareció para tanto, quizás porque tuve poca paciencia y se me hacía bastante repetitiva con tanto tira y afloja). para centrarse en una historia que avanza y no desperdicia 12 capítulos con la indecisión y los reparos de los personajes.

Historia y trama: Como ya he comentado, realmente la historia no tiene ningún misterio, se trata de una relación entre una pareja, sus problemas y las cuestiones que van surgiendo a lo largo de los capítulos y del tiempo juntos. Un aspecto que me ha gustado bastante es el hecho de que a los pocos capítulos ya se inicie la relación, es decir, que no se dan excesivos rodeos hasta que ambos optan por declararse (igualmentem la declaración no tiene desperdicio). Por otro lado, y dejando de lado el aspecto más romántico, se presenta una historia que también habla de la amistad, como denota la relación entre Takeo y Suna -su amigo de la infancia-, que dota a la serie de nuevos matices y ¿por qué no? de valores positivos, lo que considero que está bastante bien. La mayor parte de los capítulos se centran en un problema en la relación de Takeo y Rinko, aunque también nos encontraremos, como digo, otras subtramas centradas en la familia y los amigos. El hecho de que el anime tenga ese matiz cómico facilita bastante su visionado, al más puro estilo Host Club el exceso de azúcar se torna como algo divertido y entretenido.


Estilo de dibujo: Un trazo simple pero bastante satisfactorio. En este caso la estética no es algo que llame la atención, no se consiste en un aspecto fundamental para llamar la atención del espectador, sino que más bien sirve de apoyo a la trama. El protagonista, Takeo, no es un personaje al uso, sino que tiene un diseño más simple dejando de lado los ojos complejos y brillantes o el rostro estilizado, nada que ver, sin embargo, en los momentos correspondientes se torna como alguien que puede considerarse incluso guapo y atractivo.El resto de personaje siguen una tónica muy parecida en cuanto al diseño, nada especialmente reseñable. Personalmente, me encanta el contraste entre el diseño de Takeo y el de Rinko, que son completamente opuestos, pero por ello la unión entre ambos resulta aún mejor.


Personajes: Este ha sido uno de esos casos en los que la protagonista me ha caído bien, Rinko es tierna, sulce, adorable, menudita... una típica chica de tintes moe (pero sin nigún atisbo de perversión, todo lo contrario); mientras que Takeo es un hombretón bruto e imponente, pero con un enorme corazón y una timidez y romanticismo inusitados. La pareja que hacen ambos resulta de lo más tierna, así como sus interecciones o los monólogos de Takeo (donde muestra que las apariencias pueden engañar a más de uno). El resto de secundarios, como ya digo, no son para tanto, salvando a Suna, un chico frío y misterioso que cuando estña junto a su amigo cambia bastante su actitud. Una mención especial merecen los padres de Takeo, con un corte caricaturesco (incluso grostesco) nos llevan a comprender la apariencia y actitud de su hijo.


En resumidas cuentas, este es un anime altamente recomendables para aquellos a los que les apetezca empaparse de ternura, amistad y amor en un formato de 24 capítulos repletos de emociones y positivismo.

BONUS ~

15 septiembre 2015

Cuaderno de Bitácora: Andanzas de una investigadora II

Ya entrado septiembre y a modo de despedida de las vacaciones, termino con el resumen fotográfico de mi viaje de investigación por Figueras y Barcelona. 
Como comenté anteriormente, nos quedamos en pleno Figueras, en el segundo día de estancia, momento en el que aprovechamos para hacer un poco de turismo y acercarnos a uno de los museos más importantes de la zona, como es el caso del Museo Dalí, un edificio que es una obra de arte en sí mismo, envoltorio de toda una serie de esculturas y habitaciones que no consiguen sino abrir una ventana a la visión surrealista de este peculiar artista.



Aquí tenemos dos vistas de la primera sala, aquella que da la bienvenido a los visitantes, donde podemos encontrar un montaje exterior compuesto por toda una serie de piezas sin ninguna coherencia. Igualmente, también podemos ver la cúpula que cubre el montaje más impresionante de todo el museo.


Este es únicamente uno de los lados, a los lados podemos encontrar también toda una serie de montajes con diferentes piezas. En resumidas cuentas: una locura. Y aquí dejo un botón de muestra de lo que pude ver.





Realmente en cuanto a Figueras, no hay mucho más que contar (ni tampoco mucho más que hacer) así que tocaba marchar rumbo a Barcelona, donde pasamos un par de días bastante intensos.
La hora de llegada y el retraso del responsable del hostal donde estábamos no nos permitió hacer nada de lo que queríamos, por lo que nos limitamos a quedar directamente con unas amigas para cenar y, ya de paso, cisitar una tienda Disney en la que un pequeño Hans se vino conmigo a Zaragoza.
El segundo día fue el del turisteo, ya que nos topamos con toda una serie de obras modernistas mientras hacíamos tiempo hasta la hora en la que yo tenía cita con mi segundo investigado. También visitamos una galería con un montón de muñecas japonesas antiguas, así como otra (preciosa) tienda Disney que nos salió al paso.




Terminamos el día con mi cita, el correspondiente achuchamiento de la muñeca que iba a catalogar, comida un un Wok (terrible, la verdad es que no me gustó nada, todo estaba desordenado, poca variedad y con una sensación de aceitoso y graso todo, prácticamente comimos a base de helados). Igualmente, visitamos la tienda de Norma (ese piso de abajo todo lleno de manga y merchandising fue demasiado para el body) y rumbo a la estación, ya que realmente estábamos buscando una exposición de Lola Anglada pero los señores del edificio correspondiente nos tomaron por locos (y realmente esa exposición existía). Sudados, reventados, dorloridos y con sueño, volvimos a Zaragoza con ganas de coger la cama y tomar una buena ducha.

07 septiembre 2015

DIY - Camiseta de Sailor Moon

Empiezo pidiendo disculpas, ya que es el primer proceso que fotografío y las imágenes no son precisamente fantásticas (estamos en ese momento del verano en el que si subo la persiana en exceso aparece mi madre con un palo de escoba), pero espero que se entienda bien, ya que realmente no tiene vuelta de hoja.
El modelo en el que me he basado a la hora de hacer esta camiseta es el siguiente:


No encontraba un diseño que me convenciera del todo, tanto por el tema del lazo como por los colores. Así que, la mejor opción era crear un modelo propio a mi manera y sin tener miedo de las tallas chinas y esas cosas. Por lo que, por si alguien está interesado en ello, os dejo tanto el resultado como el procedimiento que he seguido.


Como unas pequeñas matizaciones: La camiseta la cogí de la sección de chico de Primark, porque tiene un cuello más cerrado que me permitía incluir el collar y el tejido es menos translúcido. Lo mismo en cuanto a los Posca, aunque no son precisamente para uso textil, ofrecen gran cantidad de colores y un acabado muy uniforme que no se va tras el lavado.


Lo que yo voy a hacer es dibujar únicamente la mitad del lazo, para que el diseño sea completamente simétrico, por lo que el punto de partida es el círculo que compone el broche, que dibujé sobre el papel marcando el centro, a la par que doblaba la camiseta por la mitad (bien doblada, no como en la imagen ><) y marcaba bien la línea del centro.

Base del broche preparada y partida por la mitad para subrayar el centro del mismo.
Una vez hemos hecho esto, desplegamos la camiseta y hacemos coincidir la línea central que hemos marcado, con la línea central del círculo. Colocamos el papel a la altura que queramos que quede nuestro diseño y empezamos a dibujar. Yo lo hice a mano alzada porque un lazo no supone mucho problema, pero puede calcarse perfectamente, al gusto de cada cual.

En la imagen podemos ver el lazo, escote y cuello marcados. En este caso, doblé también el papel vegetal para hacerme una idea mejor de lo que iba a ir en cada lado.
Una vez conforme con el diseño, el siguiente paso es repasarlo con un rotulador permanente (o con el propio rotumador textil) negro, marcando bien las líneas ya que debemos tener en cuenta que vamos a guiarnos con ellas a la hora de pasar el diseño a la camiseta. Para terminar completamente el dibujo tenemos que hacer el broche, quizás la parte más difícil, por lo que en mi caso opté por calcarlo directamente del ordenador.

Realmente es un truco muy tonto: abrimos la imagen en Paint y vamos aumentándola o reduciéndola hasta que se adapta al tamaño del círculo que hemos trazado al principio. Da igual que se pixele ya que mientras que vean las líneas podemos hacerlo perfectamente.
Un pequeño tip a la hoa de repasar el círculo que conforma el broche: yo lo hice con un rotulador más finito y a puntitos, si hacemos una línea continua corremos el riesgo de que se nos vaya a la porra nuestro círculo perfecto. Una vez esté todo repasado, procederemos con el calco.

Y así es como me quedó a mí, y más o menos la posición que tendría en la camiseta. La gargantilla finalmente opté por hacerla a mano alzada. En este momento podemos añadir otros detalles como las rayas del uniforme, si bien, yo finalmente las incluí a mano alzada.
¡Hora de calcar! Yo usé una mesita con luz hecha por mi padre, por lo que resultó mucho más fácil (y más teniendo en cuenta el hecho de que las persianas estaban bajas), pero con buena iluminación las líneas se transparentan bastante. Como se aprecia en la imagen, primero calqué el lado dibujado, con lápiz, una vez terminado, le di la vuelta al papel, haciendo un "efecto espejo", cuadramos el círculo y así obtenemos la otra mitad de forma simétrica.


Como ya he mencionado, calcaremos a lápiz. Personalmente me gusta más hacerlo así y después repasar con el rotulador textil negro muy suavemente para conseguir las líneas y hacerme una idea. Una vez conseguidos todos los detalles, empezar a repasar y colorear todas las partes de la camiseta. Otro tip un poco de perogrullo: poner el propio folio, cartón o papeles en sucio dentro de la camiseta a la hora de pintar ya que muchas veces se transparenta el color.


Por último, coloreamos al gusto y ya tenemos la parte de delante lista y perfecta. En este caso, tuve que comprar dos rotuladores extra para pintar el cuello y el lazo de un color lo más cercano posible.


La parte de atrás si que está completamente hecha a mano alzada, las líneas y el tamaño del cuello, eso sí, que vaya un poco acorde con la parte de delante, no nos pasemos ><